Ellos, con su boda íntima al aire libre en el Monasterio del Espino Bodas (Burgos) se han convertido en el fiel reflejo de nuestro cliente ideal. Una pareja de irlandeses que decide venir a casarse en España y hacer una boda pequeña con sus más allegados es que busca una manera muy personal de vivir su boda y ya, solo eso, nos motiva.

Boda íntima

La forma en la que unos novios deciden celebrar su unión es muy particular y la de Susie y Dave fue un claro ejemplo de ello. Una novia que se compra el vestido 4 días antes de su boda, que no quiere fotos mientras se prepara ni tampoco durante la ceremonia, a priori, puede resultar rara, porque estamos acostumbrados a preparar todo con muchísimo más tiempo de antelación, a no dejar nada en manos de la improvisación (con lo que nos gusta a nosotros!), a que ahora tienes que comprar esto y lo otro… Cuando lo bonito de todo esto es dejar que todo fluya.

Al final somos personas ordinarias en el día más extraordinario de nuestra vida y, eso hay muchos modos de disfrutarlo. Ellos querían tranquilidad e intimidad en momentos tan claves como el de la boda religiosa. No querían fotos mientras se estaban casando. Lo único que querían era prometerse su amor delante de los testigos más importantes para ellos, su familia. Sé que para la mayoría de vosotras, novias, esto es impensable; pero pensarlo por un momento, ¿por qué no? ¿os imagináis? Estoy de acuerdo en que tienen que confluir muchos pequeños detalles para que todo encaje, pero todo es valorarlo y darle prioridad a lo que de verdad la tiene: el amor y todo lo que ello implica.

La serenidad que transmitieron estos novios durante todo el día es envidiable. Vivieron su boda intensamente y nos confiaron el trabajo más difícil para ello, ser sus fotógrafos de boda y capturar un montón de lo que en ese momento eran fotos pero que hoy ya se han convertido en sus recuerdos, GRANDES RECUERDOS. Esto es lo que nos mueve a entregarnos en cuerpo y alma en cada boda que hacemos. Respetamos la manera en que cada pareja celebrais vuestro amor, convirtiéndonos en una especie de espectadores activos intentando crear vuestra historia, la de verdad.

Merecéis atesorar vuestros momentos más felices para crear una cápsula del tiempo a la que volver siempre que lo necesitéis. Nosotros prometemos estar ahí detrás de la cámara riendo, llorando (a mi esto se me da fenomenal!), bailando y dando lo mejor de nosotros para que tengáis las mejores fotos de vuestra boda.

Esperamos haber sabido transmitir la esencia de lo que fue esta boda de destino en el norte de España.

Ver las fotos y saborear el alto contenido emocional que llevan 😉

Gloria