- Rodéate de gente que te haga sentir bien. Los preparativos son un momento clave el día de la boda y es indispensable que estés bien acompañada por personas que no te pongan nerviosa y que te hagan pasar un buen rato. Además la música puede ser una gran aliada.
- Pásatelo bien. Disfruta del día, de las personas con las que lo vas a compartir y déjate llevar. Ya has hecho todo lo que estaba en tu mano para que todo salga bien así que es el momento de relajarse y disfrutar porque cuanto más tranquila estés, mejor saldrá todo y mejor quedarás tu en las fotos.
- Escoge un look con el que te sientas cómoda. Sé fiel a tu estilo también a la hora de elegir tu vestido de novia. Piensa que una boda es un día muy largo y que es importante sentirte lo más cómoda posible ya que vas a pasar muchas horas con el look que has elegido y, lo más importante, vas a tener unas fotos para toda la vida en la que necesitas verte reflejada pasen los años que pasen.
- Busca inspiración sobre vestidos de novia y piensa qué quieres tú para tu gran día. Ya te lo hemos dicho, no hay nada como estar cómoda en un día tan largo y lleno de emociones. Piensa en cómo vistes tu a diario y busca algo que vaya acorde con tu estilo. Necesitas verte vestida de novia sabiendo que va a ser un fiel reflejo de quién eres tú.
Di sí a un atelier. Tenemos comprobado que todo lo que pueda personalizarse va a ser un plus para tu boda. Tu vestido habla de ti y nadie te va a entender mejor que una diseñadora con la que vas a elegir desde el tejido hasta toques mucho más personales como objetos/colores/complementos que tengan un significado especial para ti.
- Prepárate en un espacio amplio con luz natural. Busca un sitio donde te sientas a gusto y no te veas agobiada por el desorden. Sobre todo si te preparas en casa, lo ideal es el salón porque, por lo general, suele ser la estancia más amplia y con mejor luz natural. Apaga todas las luces y disfruta de lo que el día tiene guardado para ti.
- No fuerces nada, deja que todo fluya. Suena muy idílico pero es real. Una novia relajada, que deja que sus emociones fluyan ese día, va a verse guapa sí o sí. Ríe, llora, canta, ama, grita, baila, abraza, siente…
- Disfruta, disfruta, disfruta. Será uno de los pocos días en tu vida en los que reúnas a todas las personas a las que quieres. Están ahí por ti, porque quieren acompañarte y disfrutar junto a ti de un día tan bonito como es una boda. Dales lo mejor de ti, se lo merecen y te lo mereces.
- Nada puede salir mal y, si hay algo que pueda salir mal, no está en tu mano arreglarlo ese día. En serio, ya te has pasado meses organizando todo. Ese día llega y tienes a un equipo de profesionales que se encargarán de que todo marche sobre ruedas. Tu misión ya ha acabado. Sé feliz, déjate llevar y agradece. Que tengas el pelo revuelto o un botón del vestido desabrochado no va a empañar tus ganas de disfrutar de tu boda, te lo aseguro. No pretendas que todo salga perfecto, habrá imperfecciones pero serán lo menos importante ese día.
- Y, ante todo, recuerda: verse guapa es sentirse bien.
Bodas En Casa Santonja
Si estás planeando una boda en Valencia, la Casa Santonja es una opción impresionante que no puedes pasar por alto. Situada en el corazón de la huerta valenciana, la Casa Santonja ofrece un ambiente único para bodas y celebraciones. En este artículo, te contamos todo lo que necesitas saber sobre cómo celebrar bodas en Casa Santonja. Descubre por qué esta finca se ha convertido en uno de los lugares más populares para bodas en Valencia y cómo puedes hacer que tu gran día sea inolvidable. ¡Lee más aquí sobre Casa Santonja bodas!
